La polis de Atenas celebra que no habrá peste, todo el mundo está contento. Menos Diotima de Mantinea, la sacerdotisa que ha evitado, precisamente, la peste. Entre el ruido de la polis, se encamina hacia el Hefestión para preparar lo necesario del rito de sacrificio de un buey en un acto de purificación para celebrar las buenas noticias. Allí conocerá a un filósofo joven y guerrero del que todos hablan: Sócrates.
‘La maestra de Sócrates‘ (Espasa, 2020), de Laura Mas, es una novela histórica que nos traslada al año 440 a. de C., en pleno esplendor de la Grecia Clásica. Con su primera novela, Mas muestra el origen de los conocimientos de Sócrates acerca de uno de los temas de los que no se hablaba en Ágora: Eros, es decir, el amor. Porque tal y como queda reflejado en la obra ‘El banquete‘ de Platón, el propio Sócrates afirmó que fue Diotima la que le mostró el camino hacia el conocimiento filosóficos del amor.
De esta forma, este relato trata sobre la vida de esta sacerdotisa en una tierra extraña. Y sobre una sacerdotisa también hasta cierto punto extraña, teniendo en cuenta que hay discusiones acerca de si existió realmente. Considero necesario simplemente mencionar que según el profesor de Estudios Clásicos de la Universidad de Oxford Armand D’Angour, la Diotima a quien alude Sócrates en ‘El banquete‘ no es la sacerdotisa, sino Aspasia de Mileto. Lo podemos leer en esta noticia del diario ABC de comienzos de este año 2020.
Según el relato de Mas, Diotima es una mujer real que pese al rechazo de parte de la sociedad ateniense, estaba apoyada no obstante por el político Pericles, quien recurrió a Diotima para librar a Atenas de la enfermedad. Y su esposa Aspasia de Mileto, una extranjera como la propia Diotima. Las dos protagonistas en la que se puede denominar, en parte, como una novela feminista. En la que incluso con más fuerza en pasajes del relato que la propia filosofía del amor platónico, destaca el papel de la mujer en la Grecia Clásica. O, al menos, el papel que mujeres como Aspasia de Mileto o la propia Diotima querían que tuviera la mujer.
Con ‘La maestra de Sócrates‘ nos adentramos en la vida de una sacerdotisa prácticamente desconocida, de la que apenas se tienen referencias históricas. Pero en este libro de Laura Mas, Diotima de Mantinea es una mujer real, atractiva tanto en lo físico como en lo mental para el joven filósofo Sócrates. Un hombre que muestra su timidez ante su maestra conversando sobre un tema tan importante como qué es el amor. Uno de los grandes sentimientos en los que se basa la vida.
Durante todo el relato, la relación entre Diotima de Mantinea y Sócrates será vista con malos ojos por parte de la población ateniense. Que murmurará y lanzará rumores acerca de la verdadera relación entre ambos. Habladurías a las que también se enfrente Aspasia, antigua hetaira muy criticada por haber provocado la separación de Pericles de su anterior esposa. Dos mujeres extranjeras en la polis más poderosa de la época y que entrará en guerra porque la tierra natal de Aspasia es atacada. Y Pericles, por amor, luchará por ella con el apoyo democrático de la polis.
¿Qué me lleva a decir que que ‘La maestra de Sócrates‘ pone más de relieve una visión feminista de la historia incluso que las enseñanzas sobre el amor que Diotima aporta al pensamiento de Sócrates? Pues que parece tener más peso durante el relato, que indaga en otras facetas del ser humano como la venganza, los celos, las diferencias entre deseo sexual y amor, etc.. Así como el papel y la influencia de los dioses en todos los aspectos de la vida cotidiana de la Antigua Grecia. Dioses a los que se les invoca y que acuden en auxilio de los mortales como Diotima si es necesario.
Como primera novela de Laura Mas, ‘La maestra de Sócrates‘ tiene una parte muy buena con respecto al lenguaje, su estilo o la documentación. Además del interés propio que despierta un personaje como Diotima. En la parte más negativa, quizás se pueda decir que hay saltos temporales que el lector no es capaz de apreciar del todo, con lapsus de tiempos intermedios que pasan sin la sensación de que así sea. O, en mi opinión, no dar aún más importancia y peso a los diálogos entre Diotima y Sócrates. Sus capítulos cortos pueden ser vistos como impedimento a dar una visión más amplia, más espacio a los diálogos, a las descripciones, a la historia en sí.
Debido a que es una novela corta, no tiene ni mucho menos la profundidad de una novela histórica como ‘El asesinato de Sócrates‘, de Marcos Chicot. U otras con mujeres protagonistas como ‘Yo Julia‘, o ‘Y Julia retó a los dioses‘. Quizás la comparación más directa sea con la novela de Chicot, debido a que en las dos, Sócrates es un protagonista, aunque en ‘La maestra de Sócrates‘ el mayor peso de la narración recae sobre Diotima de Mantinea.
Este punto que he mencionado, la profundidad, por ejemplo, de la realidad política, sociológica o filosófica de Atenas, al igual que ahondar más en la psicología de los personajes, podemos ponerlo en el lado de las carencias de ‘La maestra de Sócrates‘. Pero seguro que son cuestiones que se mejorarán con el paso de los años en próximos libros de la escritora. Porque sí que aparece la política, la sociología, las diferencias entre ricos y pobres, pero con pinceladas, sin profundizar mucho.
En definitiva, poniendo en la balanza lo positivo y lo negativo, esta es una buena novela que puede ser el primer paso de una carrera literaria que ha comenzado bastante bien. El libro es muy interesante, el estilo literario es claro, sus capítulos cortos invitan a seguir leyendo durante horas. Por lo que es un libro recomendable para leerlo. Las críticas más negativas de esta opinión sobre ‘La maestra de Sócrates‘ no dejan de ser cuestiones de estilo, y el estilo de cualquier escritor avanza y en los mejores casos, mejora con el paso de los años. Es de esperar y será bueno que esto suceda con Laura Mas porque si el inicio es bueno, la evolución será mucho mejor aún.