Sí o no. Para siempre o para nunca porque con la negativa todo llegaría a su fin. Palpitaciones. Dudas. ¿Qué decir ante un momento tan importante? ¿Sería capaz de decir al menos una de las dos palabras monosílabas que, una u otra, cambiarían su vida para siempre? Echar a correr o permanecer quieto y vencer a todos sus miedos.
Esta duda, que empieza en un relato que parece de misterio o incluso de thriller psicológico y acaba en comedia, es la que da inicio al libro de relatos ‘Gente rara. Relatos poco comunes con personajes fuera de lo común‘ (Playa de Ákaba, 2017), de Jesús Manzaneque.
Un libro perteneciente a la colección ‘La historia que contamos’ y que presentará ante el lector a decenas de personajes de lo más variopintos y que sutilmente, de forma sensacional, irán girando de la comedia al drama, de la sonrisa a la consternación, del absurdo a la más brutal de las realidades que están ahí, en cualquier hogar, en cualquier calle de cualquier barrio de cualquier ciudad.
Que vemos y no queremos ver. O que no vemos porque están ocultas en la normalidad de lo cotidiano. Tan arraigadas que por desgracia, son muy difíciles de derrotar. Así es la violencia de género, un tema tabú para las víctimas y que no solo sufren las mujeres, sino también sus hijos. Como le pasa a Irene, una niña que crece huérfana y que querrá conocer qué le pasó a sus padres.
Este libro de relatos transita de lo cotidiano a lo absurdo con maestría. De la venganza a los celos, de las historias que se inventa un pasajero en el Metro de Madrid para cada uno de los demás viajeros, hasta el odio en una mirada, una buena acción y la muerte. Ella, siempre al final de toda vida, esperando porque tiene todo el tiempo del mundo por delante para vernos pasar a todos. Por decisión propia o por injusticias del destino, sin saber por qué te eligen a ti, te golpean la cabeza y te raptan.
‘Gente rara‘ es un conjunto de 28 relatos y 8 microrrelatos que traspasarán la mirada y los ojos del lector y llegarán hasta lo más profundo de su conciencia. En unas ocasiones le harán reír y preguntarse si es posible que existan parafilias tan extrañas como las que tiene uno de los personajes del libro. En otras, quedará la duda de si será capaz de llegar a hacerlo, si tendrá el suficiente valor como para llegar hasta el final.
Unos relatos escritos con muy buena prosa, rápidos de leer, aunque el lector podrá hacerlo con calma. La narrativa entra fácil por los ojos y deja mensajes que calan en la memoria. Sobre el bien y sobre el mal que anida en todos los corazones humanos. Sobre lo que está escrito en todos los seres humanos: el día de la muerte. Sobre los momentos en los que se decide poner el punto final a todo sobrepasado por sus circunstancias. Y sobre aquellos en los que la solidaridad abre los ojos y te hacer querer más al prójimo, al familiar.
Pero también sobre lo que no debería estar escrito en el ADN de los hombres y mujeres que poblamos la faz de la Tierra. Sobre la fuerza y la superación por todas y cada una de las mujeres, que sufren día sí y día también, la fuerza de los golpes y del silencio de la sociedad. Sobre lo fantástico -que también lo hay en este libro, aunque poco- y lo absurdo, se ha dicho, y lo cotidiano.
Y, sobre todo, sobre los miles de millones de personalidades posibles. En concreto, una por cada ser humano. Cada hombre y mujer, niño y anciano, es un mundo de posibilidades. Buenas y malas. Capaces de lo mejor y de lo peor. Escritores y psicópatas. Militares y amas de casa. Amantes en el entorno laboral y mujeres a punto de casarse que entran en tu casa para ducharse el día de su boda. Y tú no eres el novio.
Jesús Manzaneque consigue deslizar su pluma por el papel mostrando un sinfín de personalidades, de las psicopatológicas a las bondadosas. De una manera que aunque la psicología del personaje no se parezca a la nuestra, podamos llegar a comprender por qué se comporta de esta forma. Eso sí, aunque en muchas ocasiones, no se puedan defender sus comportamientos. Pero como todos tenemos nuestras rarezas, en algunas tenemos que coincidir, o estar cerca, con la de alguno de los protagonistas de estos textos. Y también, claro está, con sus bondades.
‘Gente rara. Relatos poco comunes con personajes fuera de lo común‘ es claramente un gran libro de relatos cortos y microrrelatos. El lector tendrá a la fuerza que identificarse con algunos de los perfiles psicológicos plasmados en los 28 relatos y 8 microrrelatos. Conocerá a sus personajes en rápidas pinceladas, en flashes, como fogonazos que iluminan y dejan impregnada en las pupilas, viéndose aun con los ojos cerrados, la luz que ciega.
La luz de la verdad, por dura que sea. La luz del humor, del doble sentido, de la traición bien escrita y bien ejecutada (aunque reprobable como comportamiento en lo tocante a la moral y a la ética, no justificable en la vida real). En una forma de escribir limpia y clara. La luz de la buena literatura, la que se queda en la memoria, la que o te hace sonreír o te deja mal cuerpo al saber que en algunas ocasiones, lo que es ficción ha llegado a serlo en un libro porque alguien lo ha sufrido en la vida real.
Porque los escritores pueden escribir una ficción que no tenga nada que ver con la realidad. O basarse en su experiencia para crear una historia. Este libro de relatos se nutre en más de una ocasión de esa realidad que azota la sociedad, como el terrorismo. O que azota al hombre que tiene que decir «sí» o «no» y nota el codazo de la mujer vestida de blanco a su lado. Pero al final, con más o menos realidad en la ficción, al final, y eso importa en un buen libro como ‘Gente rara‘, azota algo en el interior de quien lo lee.